EUROPA
PRESS
29
agosto 2015
Rinoplastia, qué es capaz
de conseguir
La rinoplastia u operación de nariz es una
intervención que remodela mediante la reducción o aumento del tamaño, elimina
los desvíos, cambia la forma de la punta o del tabique, estrecha los orificios
nasales o cambia el ángulo entre la nariz y el labio superior. Además, no solo
es un proceso de estética, sino que también sirve para aliviar algunas
dificultades respiratorias combinándose con el tratamiento septo nasal.
El cirujano
plástico, estético y reparador de
En qué consiste una rinoplastia
El objetivo de esta operación es modificar el esqueleto óseo y cartilaginoso de la nariz, en el que el cirujano separa la piel de su soporte y esculpe tanto el hueso como el cartílago, dando la forma deseada. Esta técnica se realiza a través de incisiones que se practican en el interior de la nariz y no dejan ninguna cicatriz externa visible, excepto cuando es necesario estrechar las alas nasales.
Para realizar esta operación se emplea anestesia local y sedación profunda, para que el paciente permanezca dormido durante toda la operación que tiene una duración de aproximada de dos horas.
Después de la operación, la nariz es escayolada para mantener la nueva forma y tendrá que permanecer así durante una semana. Al principio, la cara está inflamada y es normal tener un poco de edema, pero después de 8 o 10 días el rostro no tendrá apariencia de haberse sometido a una rinoplastia y se podrá realizar vida normal, a pesar de que el resultado definitivo se obtendrá a partir de los seis meses, señala el experto.
Hay que tener en cuenta que durante los primeros días se tendrán que evitar los movimientos bruscos y se tendrá que dormir boca arriba, hablar y reír poco, no utilizar gafas, ni besar durante 14 días.
La proporción ideal
A pesar de que cada cara responde a un tipo de patrón, el especialista explica la proporción ideal que hay que conseguir para cualquier rostro. "Mirando la cara de frente, la medida entre el entrecejo y la base de la nariz debe entrar tres veces en el largo de la cara (desde el nacimiento de la frente hasta el mentón). Si miramos el rostro de perfil el ancho de la base de la aleta nasal debe ser igual al ancho del ojo y tanto la frente, como la punta de la nariz como el mentón deben estar situados en la misma línea", apunta el doctor López.
El director